lunes, 7 de marzo de 2016

Un español en EEUU: Comienza el sueño americano

Viajar es una palabra que evoca diferentes sentimientos dependiendo de quien la oiga y muchas veces nos produce miedo por el hecho de salir de la "zona de comfort" pero también nos hace avanzar como persona. En mi caso yo he viajado más de lo que debería nadie de mi edad y como tengo la extraña y curiosa costumbre de hacer fotos a todo podré relatar mi experiencia con las mismas. En mi caso decidí irme a trabajar a EEUU a un parque de atracciones TODO UN VERANO y la locura viene ahora, IBA A SER BASURERO, pero yo feliz ojo. Estas decisiones se toman rápido y sin mirar atrás. Sin arrepentirte de tus decisiones, porque una vez estás durmiendo en un colchon que parece de usar y tirar, no hay otra, tienes que acabar.

Imaginaros una persona que se va todo un verano a EUU y PAM en el areopuerto le hacen un control rutinario de aduanas. Me abrieron todo, hasta me hicieron quitarme los zapatos, sacar el portátil... Si no estaba ya nervioso encima la policía ahora me registraba de arriba a abajo. En la foto se puede ver un reloj que no volvió, es una larga historia, ya os la contaré.

Uno no es consciente de que está haciendo en muchos casos de su vida, en el mío me subí a ese avión sin usar la cabeza, sino el corazón y fue una de las mejores decisiones de mi vida pues conocí personas y experiencias.  ¿Y qué es lo que se ve antes de irte a vivir el sueño americano? Pues algo así:

Para Filadelfia que me iba tú. Y sin dudarlo, 9 horas de viaje por el oceano hacia lo desconocido. No sabéis lo que es no sentirse de ninguna parte, con toda la vida en una maleta divagando por las calles, ¡joder si es que me adelanto! El viaje en avión fue mejor de lo que me esperaba. La comida lejos de ser un mojón me pareció buena y todo:



 Estaba muy buena, aunque yo soy una persona de buen comer, no soy un buen crítico en este sentido. ¿Pero qué puedes hacer casi diéz horas de viaje? Pues delante tuya tienes una pantalla tácticl que es la hostia en vinagre, tenía películas de hace una semana y yo me vi unas cuantas. Cuáles fueron... La de la imagen es Mila Kunis de El Destino de Jupiter que me entretuvo, lejos de que la vi en español latino, aunque me quede dormido, lógico pues son seis horas de diferencia y el cuerpo lo nota, digo yo. Otra que vi fue It Follows de terror-suspense, pero la vi en inglés sin subtítulos (ya iba yo emocionado con mi inglés parece) y no me entere de nada. La familia Belier, que me gustó bastante, con subtítulos en inglés y una más que no me acuerdo, ¡Cómo disfrutaba yo en esa pantalla!



 ¿Mi primera imagen de EEUU? Hice trasbordo Filadelfia-Cleveland y al llegar a este segundo tuve esa sensación de llegar al lugar acertado. Por fin mi destino, solo me faltaba llegar a donde dormiría, un Airbnb que estaba por el centro de la ciudad. Para los que no lo sepáis esto es un portal que la gente oferta habitaciones libres y yo me pille una para una noche. 40 dólares creo que fue o 40 euros, ya que importa...


A la derecha tenéis el Sol que me dió la bienvenida a los Estadios Unidos de América. ¿Imponente verdad? Lo tuve unas semanas de fondo de pantalla en el móvil, así soy yo. Lo siguiente fue ir a por las maletas. Todos tenemos ese miedo infundado de perder nuestras pertenencias y siempre se nos pasa por la cabeza, pero en mi caso no tuve estos problemas, ¡doy gracias!

Lo que viene a continuación es gracioso, bueno para mí no lo fue en el momento. Una vez con mis pertenencias fui corriendo a buscar dónde se pedían los taxis. Allí lo tienen todo muy bien organizado, vas a una ventanilla, dices tu destino, te dan un ticket y ala, fuera a meterte en el taxi. Meto mis maletas que pesaban un huevo en ese coche exótico. Era inmenso. Yo estaba asustado, era un país demasiado grande para mí. Recuerdo que le dije a donde iba, pero mi nivel de inglés dejaba mucho que desear así que le di el ticket y él arrancó. La conversación que tuvimos en el trayecto fue graciosa, yo le comente un poco de donde era que hacía allí, pero él me hablaba Y NO ENTENDÍA  NADA. Mejor carta de presentación imposible. En ese momento piensas de todo, ¿Qué hago aquí, ¿Por qué he venido?, ¿Será siempre así?, ¿Tan mal se me da el inglés?... Con el tiempo corroboré que el acento de los americanos de Cleveland, era incomprensible para el ser humano.


Todo era diferente: las carreteras, las señales de tráfico, los pivotes de seguridad, las calles, las personas... Se hacía de noche y el taxista me dejó justo en mi destino. Yo estaba muy perdido e incluso una vez bajé no tenía claro que era allí, pues era un sitio de oficinas en el centro, no parecía mi apartamente. Así que yo, ser inteligente, empecé a andar por toda la ciudad con mis maletas que pesaban un quintal como una hora. Pero es que era una jodida ciudad fantasma, no había un alma. Apenas coches. Serían como las 19:00 o las 20:00 y toda la gente ya estaba en sus casas, algo que para mí era impensable en España. Por no mencionar LA INMENSIDAD DE ESAS CALLES... Daba miedo, no sabía dónde me había metido. Di tantas vueltas con el móvil con el GPS buscando mi destino. Y dependía de una captura de pantalla, pues no tenía datos. Y me orientaba mirando los nombres de las calles. Me fue imposible, yo daba vueltas como un pasmarote. Se hizo de noche. Miedito en el cuerpo.

Tiene que ser aquí, a no tiene que ser por aquí, espera esto es una Iglesia...Vale esto es un centro comercial, mierda se me va la bateria del móvil... Yo pensaba que cualquiera podía coger y atracarme, pues todos me miraban ( obvio era un inmigrante con dos maletones y cara de que hago aquí) y se hacía de noche y yo seguía en la calle, sin casa, no sabéis lo que es esa sensación de llegar a otro país y sentirte en la calle, sin ayuda. Recuerdo que pasó un coche de la policía y OBVIAMENTE SE ME QUEDO MIRANDO pero yo no quería llamar la atención así que hice como si supiera a donde iba y ni si quiera cruzamos miradas, no me apetecía que pensaran que era estupido (PD: LO ERA). Pues nada, no lo encontraba. Pero el taxista me dijo que me dejó en mi destino, justo la dirección que ponía en AirBnb... ¿Y si era allí? Di otra vuelta a la calle, con los brazos agarrotados de mover 30 kilos de maletas y con la noche sobre Cleveland, llegué a mi destino. El hombre estaba buscándome en la puerta, que estupido me sentí.



No me lo podía creer. Después de posiblemente 15 horas de viaje tiras todo en la habitación, sin fuerzas, rendido. De alguna manera me sentía en casa. Me pegué una ducha inolvidable, me sentí nuevo. Esa casa fue un balsamo para mí. El hombre se llamaba Sendhil y fue un gran anfitrión. Con él si pude poner a prueba mi pobre inglés. Y con su WI-FI pude comunicar que estaba vivo a mi familia y amigos.




 Estaba muerto de hambre, así que antes de que cerraran, porque cerraban muy pronto bajé a un mediterraneo. Pero esto es EEUU amigos, aquí todo es fuerte. Esa comida mediterranea era picante, fuerte y la ensalada me mató y la vez me encantó. Aún puedo recordar ese sabor fuerte de vinagreta, aunque era una ensalada supuestamente del mediterraneo. No tienen ni idea estos americanos, pensé.

¿Las vistas eran increibles a que sí? Estaba flipando. Y ese momento de relax fue único, comiéndome mi comida mediterranea por casi 20 dólares, pero yo era felíz. Y mi coca-cola adventurer, me salió como anillo al dedo. Así fue mi primer día en EEUU. Me sentía pequeño, asustado, perdido, pero poco a poco uno se acostumbra a todo y lo que me esperaba en CEDAR POINT, el parque de atracciones, sería totalmente diferente. Era el momento de disfrutar de esas vistas. Me sentía un privilegiado. Aunque no lo sabía se acercaba una tormenta eléctrica, pero eso es otra historia.